Ésta hermosa imagen nos transporta hasta 1969, con un jovencito Nicolás de las peñas estrenado nueve años antes, con la entrada perfectamente pintada, y adornada con la bandera española.
En nuestro Club siempre tratamos de transmitirle a los jugadores lo que representa la camiseta que visten, los colores que portan, y el escudo que lucen.
Una camiseta que representa a centenares de familias, cuyos abuelos, padres e hijos han vestido, llevándola por toda la región con orgullo y honor.
Un escudo anclado en el pecho, a la altura del corazón, estampado ahí como coraza protectora.
Una cancha que se mantiene vigente en el tiempo, que nos ha visto nacer, nos ha visto crecer, nos ha visto envejecer, y cientos de chicos que reinician el ciclo. Cambian los nombres y las caras, más no la esencia.
En la formación, parados de izquierda a derecha, Ginés, Churri, Leoncio, Béjar, Carreño, Nene, Pérez y Villares.
Abajo, de izquierda a derecha: Flujines, Sellos, Faustino, Pavo, Martín y Chapi I.