Bullense y Cehegín se fajaron de lo lindo en la segunda semifinal de la copa Noroeste 2019. Un solitario gol del «Pájaro» Adrián López bastó para doblegar a un incómodo Cehegín y meterse en la final, donde espera Calasparra.
Bullense y Cehegín, enemigos legendarios alla por el siglo XV, se volvieron a cruzar, una vez más, en una cancha de fútbol. Y si bien el Bullense está hoy un peldaño por encima de su vecino, lo cierto es que en el mano a mano de ayer fue todo muy parejo, muy disputado y muy friccionado.
Ambos equipos andaban con ganas de regalarse una alegría y meterse en la final de la copa, y ambos lo pelearon con el cuchillo entre los dientes.
El equipo de Mapeka, más ordenado en la cancha y con más pólvora arriba, estuvo cerca de romper el empate en varias ocasiones, con llegadas claras del «Pájaro» y de «Juguete» Alcaráz, pero el empate y la incertidumbre se mantenían.
Y tanto fue y fue el «Pájaro» que al final le salió: En una embarullada jugada dentro del área chica fue derribado y el árbitro, muy cerca de la acción, decretó penal. Fue el mismo «Pájaro» quien tomó la pelota y definió firme para poner el 1-0.
Pero la apertura del marcador no hizo otra cosa que cerrar las líneas, el juego y su disfrute. Falta por acá, corte por allá, por momentos se volvió un partido feo de ver.
Los rojiblancos tuvieron chances de rematar el partido pero la pólvora se había agotado, y tocó sufrir. Los últimos minutos tuvieron al Bullense agazapado recibiendo centros y faltas que cerca estuvieron de complicar la noche.
1-0, resultado justo, sin paliativos, pero con poco decoro para lo que puede dar éste Bullense, que hoy irá a por su primer logro en éste ciclo.